Si eres un aficionado a la mecánica o simplemente quieres ahorrar dinero en el mantenimiento de tu coche, quizás te interese saber cómo reemplazar una bobina de ignición en un vehículo. La bobina de ignición es una pieza clave para el funcionamiento del motor, ya que se encarga de transformar la corriente eléctrica de la batería en una chispa de alta tensión que enciende la mezcla de aire y combustible en las cámaras de combustión. Sin ella, el motor no arrancaría ni funcionaría correctamente.
En este artículo te explicaremos paso a paso cómo reemplazar una bobina de ignición en un vehículo, qué herramientas necesitas y qué precauciones debes tomar. También te contaremos cuáles son los síntomas de una bobina de ignición defectuosa y cómo puedes comprobar su estado. ¡Sigue leyendo y aprende a realizar esta tarea con éxito!
¿Qué es una bobina de ignición y cómo funciona?
La bobina de ignición es un componente del sistema de encendido del motor, que se compone también de las bujías, los cables de bujía, el distribuidor y el módulo de encendido. Su función es convertir la corriente eléctrica de baja tensión que proviene de la batería (12 voltios) en una corriente de alta tensión (entre 20.000 y 40.000 voltios) que se envía a las bujías para generar la chispa que inicia la combustión.
¿Cómo se encuentra hecha?
La bobina de ignición tiene dos bobinados o enrollamientos de alambre, uno primario y otro secundario, que están conectados entre sí por un núcleo de hierro. Cuando la corriente eléctrica circula por el bobinado primario, se crea un campo magnético que se almacena en el núcleo. En el momento adecuado, el módulo de encendido interrumpe el flujo de corriente en el bobinado primario, lo que provoca que el campo magnético colapse y se induzca una corriente eléctrica de alta tensión en el bobinado secundario. Esta corriente se transmite a través del distribuidor y los cables de bujía a las bujías correspondientes, según el orden de encendido del motor.
Existen diferentes tipos de bobinas de ignición, según su diseño y ubicación. Algunos vehículos tienen una sola bobina para todo el motor, otros tienen una bobina por cada cilindro o cada par de cilindros, y otros tienen una bobina integrada en cada bujía. El tipo de bobina que tenga tu vehículo determinará la dificultad y el costo del reemplazo.
¿Cuándo y por qué hay que reemplazar una bobina de ignición?
La bobina de ignición es una pieza sometida a un gran estrés térmico y eléctrico, por lo que con el tiempo puede deteriorarse o fallar. Una bobina defectuosa puede provocar problemas graves en el rendimiento del motor, como pérdida de potencia, aumento del consumo de combustible, emisión excesiva de humo, vibraciones o incluso fallo total del encendido.
Algunos síntomas que pueden indicar que la bobina de ignición está fallando son:
- El motor no arranca o le cuesta arrancar.
- El motor se apaga o se cala al ralentí o al acelerar.
- El motor funciona con irregularidad o con tirones.
- El motor pierde potencia o tiene dificultad para subir de revoluciones.
- El testigo del motor se enciende en el tablero.
- El escáner arroja códigos de error relacionados con el sistema de encendido.
Si detectas alguno de estos síntomas, lo primero que debes hacer es comprobar el estado de la bobina de ignición. Para ello, puedes usar un multímetro o un probador de chispa, siguiendo las instrucciones del manual del fabricante. Si la bobina no cumple con los parámetros especificados o no genera chispa, deberás reemplazarla lo antes posible.
El intervalo recomendado para reemplazar la bobina de ignición varía según el tipo y la calidad de la misma, así como del uso y el mantenimiento del vehículo. Algunos fabricantes sugieren reemplazarla cada 60.000 o 100.000 kilómetros, mientras que otros no especifican una duración determinada. Lo mejor es revisar el estado de la bobina periódicamente y cambiarla cuando sea necesario.
¿Cómo reemplazar una bobina de ignición en un vehículo?
Reemplazar una bobina de ignición en un vehículo no es una tarea muy complicada, siempre y cuando tengas las herramientas adecuadas y sigas los pasos correctos. Antes de empezar, debes asegurarte de tener la bobina de reemplazo adecuada para tu modelo y año de vehículo, así como los cables de bujía si también los vas a cambiar. También debes desconectar el borne negativo de la batería para evitar cortocircuitos o daños eléctricos.
Los pasos para reemplazar una bobina de ignición en un vehículo son los siguientes:
- Localiza la bobina de ignición en el compartimento del motor. Puede estar cerca del distribuidor, en el bloque del motor o en la tapa de las válvulas, según el tipo de bobina que tenga tu vehículo.
- Desconecta el conector eléctrico de la bobina, presionando la pestaña o el clip que lo sujeta.
- Desconecta los cables de bujía de la bobina, marcando su posición y orden para no confundirlos al volver a conectarlos.
- Desatornilla o desengancha los tornillos o clips que sujetan la bobina al soporte o al motor.
- Retira la bobina vieja y compárala con la nueva para verificar que sean iguales.
- Coloca la bobina nueva en el mismo lugar y sentido que la vieja, asegurándote de que quede bien fijada al soporte o al motor.
- Conecta los cables de bujía a la bobina, respetando el orden y la posición que tenían antes.
- Conecta el conector eléctrico a la bobina, asegurándote de que quede bien encajado.
- Conecta el borne negativo de la batería y arranca el motor para comprobar que funcione correctamente.
¡Enhorabuena! Has logrado reemplazar una bobina de ignición en un vehículo con éxito. Ahora puedes disfrutar de un mejor rendimiento y eficiencia de tu motor, así como evitar averías mayores o costosas. Recuerda revisar periódicamente el estado de la bobina y cambiarla cuando sea necesario.
Esperamos que este artículo te haya sido útil y te haya enseñado cómo reemplazar una bobina de ignición en un vehículo. Si te ha gustado, compártelo con tus amigos o déjanos un comentario con tu opinión o experiencia. ¡Hasta la próxima!